martes, 1 de marzo de 2011

Mentiras fundamentales vol.1

Dejar a alguien no es fácil. Lo tenemos todos claro eso. Si en algún momento has pensado cómo dejar a tu pareja, has sufrido más que con Spartacus y, seguramente, lo habrás hecho mal. ¿Pero qué significa hacerlo mal? Ah amigo... ¿Hacerle daño a la otra persona? ¡Noooooo! ¡Error!!! Hacerle daño, si tu pareja te quiere, se lo harás seguro...porque te quiere, precisamente, y tú ya no. Es la consecuencia inmediata de dejar a alguien, la primera, de hecho. Si te quiere un poco, le dolerá, claaaaaaaaaaro que siiiii, porque forma parte del paquete. Si tienes olfato, un pedo te ofende, claro, porque tienes olfato. Porque es la consecuencia natural. Pues si te dejan mientras tu aún quieres, te duele.
Así que por favor, por-fa-vor, dejemos de decir estupideces como ''no le dije que estaba con otra/o por no hacerle daño'', ''no hemos roto, le he dicho que estoy confundido/a y a ver qué pasa'' y toda esa sarta de memeces que me dan urticaria súbita cuando las oigo.

Parece que con el tiempo, a base de repetir estas grandes frases cínicas de película baratunga, han colado.Y además, se han extendido envueltas en un halo de bondad y buenpersonismo que, entonces sí, me enerrrrrva y me vuelve mala como Joan Collins. Yo he encontrado tres tipos de cutre-argumentos de ruptura universales:

- No le digo que estoy con otra/o, le digo que tengo dudas, para no hacerle daño. Traducción: no le digo la verdad porque soy un cagueras que no tiene ni valor ni decencia para aguantar el chaparrón que el dejado tiene todo el derecho de echarle encima. Te dejan y, encima, te quitan lo que más mola y más te ayudará, que es el cabreo. Además...¿que tienes dudas? ¿dudas entre pasta o pizza? ¿Dudas si te has dejado la luz del parking abierta? ¿Dudas de qué, calamar? Amigos y amigas, cuando oigáis lo de las dudas, ya podéis sacar el mazo automáticamente y darle pero bien, porque lo que venga después de eso será el final, así que ya puestos, salgamos a hombros. Además, decirle a alguien ''tengo dudas'', a parte de ser un concepto vacío, és el clavo ardiendo al que todo dejado se agarra, porque cree que sólo tiene que mejorar y renovarse para que al dejador incompetente se le disipen las dudas de marras. Con lo cual, empieza ahí una batalla por la reconquista, que le quita la dignidad a esa persona y multiplica el luto innecesariamente. Dile la verdad y dale la oportunidad que te olvide, aunque sea por la vía odio los primeros meses.

-Creo que necesitamos tomarnos un tiempo y te pido que me lo des. ¿Me pides qué? ¿Tiempo? ¿Qué es ''tiempo''? ¿Me pides un reloj? ¿Un calendario? Si alguien sabe qué implica eso, meloexpliqueporfavor. Tal y como yo lo veo, la traducción es: te voy a dejar, pero como tengo la integridad de una lombriz, te pido ''un tiempo'' durante el cual yo podré hacer lo que me pase a mi entre las ingles pero tú no. Tú espera, no me llames ni hagas nada, ni me preguntes ni me envíes sms ni nada que yo, cuando quiera, ya vendré o te llamaré o haré lo que me pida mi cuerpo flamenco. Qué valor... ¿Qué pasa entonces? Que cuando el timado con el timo del tiempo empieza a desesperarse, un día llama. Y ya lo tenemos, desenlace fácil: '' ¿por qué me llamas? ya me estás agobiando... te he pedido tiempo! Mira, así no podemos seguir, eh? Me estás ahogando, Bla bla...'' Y por cansancio, la historia se acaba. O por cansancio, o porque el dejado descubre lo que pasa en realidad: que el otro no le quiere. Si le quisiera un poco, le echaría un cable... y no al cuello, a modo soga, como ha hecho.

- Creo que tendríamos que vernos con otras personas. ¿Quieres decir abrir más los ojos cuando me cruce con personas en la calle? ¿Ponernos personas al lado a ver si combinamos bien por colores? Porque si es por ver, en mi empresa trabajamos 237 personas ...¿es eso? No, lo  que tú quieres estar con otra persona, no sólo verla, farsante. Y pretendes que yo me vuelva ''moderna/o'' como tu crees parecerlo con este comentario, mamarracho/a, para que yo me encapriche de otra persona y tú, o bien te quedes tranquilo porque nos dejamos a la vez (como quien de adolescente no quiere colgar y repite el 'cuelga tu, no cuelga tu') o bien uses mis escarceos con otros/as para tener la excusa que necesitas para dejarme y, encima, ofendido/a. Menuda estrategia legionaria... cutre y cobarde. Déjame tu si quieres, que yo haré lo mismo cuando quiera, no antes.

Así, en resumen, estas vendrían a ser las peste-excusas las más usadas. Aunque hay otra variante, daliniana según mi opinión y que no acabo de ver, que tendría un lugar destacado en el ranking de mentiras memas. Es el conocido Estamos fatal, pero no le dejo por no hacerle daño...un oxímoron llevado a la vida real, insólito! Traducción: no le dejo porque no tengo a nadie más y son un mierda. Esta situación me plantea dos preguntas: ¿sigues siendo su pareja, pero amargada por estar al lado de alguien a quien acabarás por detestar? ¿O le amargas tú a él/ella poniéndolo fino/a a desprecios y haciéndolo/a sufrir notando que algo pasa pero que no le dices para no herirle? Grandísimas soluciones, si. Dios quiera que no seas tú quien tenga que decidir el futuro de la humanidad ante un tribunal de alienígenas, porque con ese sentido de la verdad y de lo que está bien y está mal, no sobrevive ni un ficus.

Que mal entendido tienen algunos eso del ''no hacer daño'' madre mía...Sí los médicos pensaran así, no nos tocarían ni con un puntero láser.

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